miércoles, 24 de noviembre de 2010

Por debajo de su vestido de gaza arden las palabras
esas a cuales sus colores vivos se sujetaron
Esas palabras que dejan el proposito de una vida a cuestas
Y el rostro de una nina perdida
que camina a paso agigantado
pensando que si tal vez el tiempo acelerara
esas palabras tendrian algun significado
Espejo en mano, absorve su belleza
sus manos anicos
tan cansadas de sujetar
la esperanza de un amor que se va
el deseo de ahogarse en ojos donde la luna parece asomarse
y donde todo lo que no es real no existe,
no sea de confundir
porque real alguna vez fuiste
Pero fuiste,
un caracol arrastrado por la espuma de mar
Fuiste y sin saber porque me pregunto si otra vez llegaste a amar.